Si no reconozco mi fuerza interior corro el riesgo de que surja esa emoción básica que es el MIEDO. Evidentemente, para gestionarlo hay que sentirlo. Hay que aprovechar su experiencia como consejero. Pero que no te domine. Que no evite apreciar tu verdadero poder. Que no amenace tu autoestima.

En cualquier caso, la mejor forma de afrontar el miedo es con una adecuada ACTITUD. La actitud determina el ánimo y el comportamiento con el que te enfrentas a las situaciones que se te presentan. Es uno de los pilares del modelo de competencias que se impone hoy día en cualquier relación personal, social, económica, política, etcétera. Para ser competente en algo, primero tienes que adquirir una serie de conocimientos, un “saber”. Cuando ese saber se interioriza, provoca una serie de habilidades que te llevan a conseguir un “saber hacer”. Esa aptitud alcanzada no es suficiente para ser competente. Te hace capaz, pero necesita un escalón más para llegar a obtener un “saber estar”. Ese salto es la Actitud, tu manera de estar. Esta condiciona tus capacidades, tu comportamiento y tus acciones.

La Actitud es una variable que determina la consecución de tus resultados. ¿Sabes qué es lo mejor? Que depende exclusivamente de ti. Es claramente estratégica y marca la diferencia por tres razones:

• Incide en tu autoestima, ya sea en tu forma de percibirte, en cómo te ves y cómo proyectas tu autoimagen en los demás. Por tanto, provoca autoconfianza y, como no, confianza en los demás.
• Es gratis, no cuesta dinero. Ni siquiera cuesta esfuerzo excesivo. Pero tu actitud tiene la capacidad de determinar influencia en ti y en los demás.
• Es inimitable, tu actitud es tu actitud. Aunque yo pueda acercarme a tus comportamientos, tu actitud es diferenciadora y exclusiva de ti.

Tu Actitud no suma, sino que multiplica

La Actitud condiciona, de forma muy clara, nuestras emociones como respuestas bioquímicas. Estas respuestas son inmediatas al significado que aplicamos a los estímulos que recibimos. Pero, si queremos sostener una emoción y convertirla en un estado emocional duradero, lo que tenemos que analizar es qué Actitud nos conduce a ese significado.

Una forma fácil de configurar tu Actitud es analizar la manifestación o el ánimo con que te enfrentas a una determinada situación. Eso depende de dónde pongas el foco. Este foco puede estar puesto en los obstáculos y dificultades que encuentras en el camino o en sus beneficios y soluciones. Pero también depende de la fisiología corporal que estés empleando. Sin duda, esta va a condicionar tu forma de enfrentarte a los estímulos externos o internos que recibes. Y el lenguaje que utilices es fundamental, porque a su vez está condicionando ese significado y por tanto te está llevando a una emoción diferente.

Por tanto, es evidente que tus conocimientos y tus aptitudes suman. Son importantes, pero no suficientes. En cambio tu Actitud multiplica. Es la que te permite afrontar los comportamientos ante las situaciones que se plantean y, claramente, condiciona las acciones a desarrollar para alcanzar los resultados que te plantees.

El método que te hará mejorar tu actitud

Y hoy lo que te propongo es que analices esos resultados que estás obteniendo. Si son los que te conducen hacia tu ser declarado, magnífico. Si no es así, comienza por modificar tu actitud. ¿Cómo? En cualquier situación de miedo o incertidumbre, tan solo di STOP:

S – Sonríe, para, respira. Tómate un instante para dejar tu mente en blanco. No pienses en nada, ni te preocupes por nada. Simplemente relájate.

T – Toma consciencia. Vuelve a la realidad y comienza a comprender la situación y, sobre todo, tus emociones ante ella. ¿Cómo te sientes?

O – Observa, calibra y busca opciones. Analiza el problema. ¿Cuál es su gravedad? ¿Puedes darle solución? ¿Qué alternativas tienes?

P – Procede haciendo lo que te acerca a tu verdadera esencia. Actúa en base a todo el análisis anterior.

¿Quieres trabajar tu actitud?

Si te interesa profundizar más en tu actitud para que influya de la manera más óptima en tu proyecto de vida, puedes contactar conmigo en paco@coacharte.es

De igual manera, puedes visitar este artículo, donde te hablo de habilidades sociales que serán básicas para tu éxito personal y profesional.

Espero que te haya interesado el artículo. ¡Nos vemos en el siguiente!